Roberto Solís Valles actual diputado local con licencia y candidato a presidente municipal por el Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) en Huejotzingo de donde no es originario y en donde tampoco es aceptado por la población que considera esa candidatura una imposición, además de la división que provocó su imposición en su MORENA, del escándalo de su bodega de termo calentadores de amenazar periodistas, hoy es exhibido por su impunidad, por el tráfico de influencias y por amenazar a una familia que decidió romper el silencio y pide al gobernador Sergio Salomòn Cèspedes Peregrina que aplique la justicia y castigue a quien hace 11 años le arrebató la vida al padre de esa familia.
“Roberto Solís le arrebató la vida a mi padre y desde hace 11 años no es lo mismo porque no está, él se encargó de destruir mi vida, la de mi familia, nunca había hablado de esto por miedo, porque su familia nos intimidó, en ese entonces, su primo, el señor Mariano Solís era el presidente de mi pueblo, yo quise denunciar, no pude porque nos amenazaron que si hacíamos algo, él podía callarnos tan fácilmente porque ellos tienen el poder …” así inicia el relato de Silvia quien finalmente tuvo el valor de romper el silencio para denunciar la impunidad y el tráfico de influencias del entonces sobrino del presidente municipal de San Lorenzo Chiautzingo y hoy diputado de la 4T en Puebla y aspirante a presidente municipal de Huejotzingo.
Ella aseguró que después de dar su declaración teme por su vida porque sabe que él es capaz de mandar a desaparecerla, tal como la amenazó hace 11 años y por eso pide justicia, “Él no es una buena persona” dice al recordar como en esa tarde lluviosa cuando Roberto Solís transitaba, casualmente en el barrio de San Esteban frente a la casa de su primo, el presidente municipal, atropelló al papá de Silvia y después de atropellarlo regresó varias veces la camioneta sobre lo mismo para terminar su obra, argumentando que pensó que eran piedras del camino así obra el testimonio del entonces médico que atendió al hombre que moribundo en el hospital General de Huejotzingo y que después murió por traumatismo craneoencefálico y estallamiento de vísceras, minutos antes, en medio de su agonía alcanzó a hablar con Silvia para decirle que ”Roberto Solís lo había atropellado”
En medio de esa fría madrugada, alrededor de las 3 de la madrugada luego de reconocer oficialmente el cadáver de su padre Silvia describe como el cuerpo de su padre tenía las llantas marcadas. Y acusa que actuó con toda la intensión para matar a su padre. En ese momento un hermano de Roberto Solís pidió que firmaran un acuerdo donde no piden nada para la reparación del daño, situación que ella no aceptó por lo que el hermano la empujó y la amenazó tachándola a ella y a su madre de pueblerinas mugrosas. Fue en ese momento cuando la licenciada Diana Mendoza entregó la hoja para que la firmara la recién viuda.
A la muerte de su padre, Silvia como hermana mayor se hizo responsable de la familia, hoy con dos hijas y con su familia sabe que es un riesgo hablar de ese hecho, pero sabe que su testimonio debe servir para que a gente sepa realmente quien es Roberto Solís y para que el gobernador y el propio presidente de la Repùblica Mexicana no permitan la impunidad de ese señor.
“Roberto Solís sabe que no miento, él sabe que es verdad lo que le arrebató la vida a mi padre y que tal vez me mande a desaparecer”
Hace 4 meses lo encontré en el Barrio de San Esteban, él se volteo y se metió a su auto y subió los vidrios, se oculta, sabe lo que hizo, recuerda Silvia sin apartarse de su llanto con el que ella intenta curar sus heridas del corazón. Entonces recordó que en ese junio, apenas un dìa después del “dìa del padre” y luego del lamentable suceso, Roberto Solís ni siquiera fue detenido, la impunidad de ser sobrino del presidente municipal le ayudó, ni siquiera les permitieron colocar la cruz en el lugar donde murió su padre, pues es frente a la casa del entonces presidente, Mariano Solís
Por ese motivo es que ahora es que Silvia pide que se abra una carpeta de investigación para que haya justicia por su padre, por su familia y espera que el Estado la proteja a ella y a su familia de la impunidad que ha permeado por todos estos años.
Espera que después de este testimonio público no desaparezca de la geografía local, como muchas mujeres han desapar3cido en busca de su libertad y de la justicia.